Revoloteaba en mi memoria, surgía

Entre la niebla de mis pensamientos, ingrávido,

 Sonambulezco, torturador.

Sonata de estío  

Valle Inclán.

I

Resurgiste en mi memoria otra noche, algo así como  ejerciendo presión desde el inconsciente sobre mi cuerpo. Perturbaste mis sueños, aunque no sé si fue efectivamente una perturbación o fue una nueva brisa que me sorprendió.                                                                                                                                                                   Sucede que cuando un sueño me toma por las noches, al despertar me pregunto si es posible que  las conciencias se unan a través por un capricho del cosmos... Si es que fuiste vos queriéndome hablar y ante el miedo y la distancia solo pudiste de ésta forma.  Porque aunque vivimos en la era de  la   comunicación  hoy, al menos vos y yo  estamos  completa y absolutamente distantes.

Por decisión, por necesidad y porque creí que era lo correcto.Y al pensar de esta forma, concluyo  que…

El mismo miedo que se apodera de mi cuando intento escribir un mensaje que termino borrando, es el mismo miedo que  posiblemente te silencie.

Si! Estas hipotéticas deducciones son las que vienen a mí  luego de haberte encontrado entre sombras.  Y por ese “delirio místico” que me posee y que  instaura un torbellino de pensamientos en mi. Hace que lo tome como posibilidad, la otra  segunda posibilidad es que sea mi inconsciente al que  reprimo una y otra vez, por  la necesidad de "superarte", quien decide  liberarse  y  volver a sumergirse aunque no sea más que en fantasía,  en el placer de verte. Permitiéndose  creer que el tiempo vuelve atrás por un instante,  que algo de lo dicho no es cierto, que vos también  lo extrañas  y que algo de la materialidad, de éste mi cuerpo se perdió  con  vos.

Y si,  por último ( y en mi inevitable) me queda la visión mas negativa de la cosa...quizá  no es más que una construcción: ladrillo a ladrillo formándose en mi el muro del      AUTO ENGAÑO.