lunes, 12 de noviembre de 2012

Puedes hacerlo.


Gira en mi carne 
una noche...

Puede ser ésta 
o simplemente otra.

Puedes inspeccionar 
mis venas, 
puedes mirarme 
cuando ya mi piel se haya quitado.

Puedes hacerlo,
te doy derecho.

Solo toca para mi

Una canción
con pequeños sonidos, 
acaricia las teclas, 
que alimenten mi oido.

Utiliza la noche,
los interminables segundos,
las centecimas que ahogan
que quitan el aliento

Puedes hacerlo, 
te doy derecho.

Porque hoy solo quiero 
gires en mi carne
como pentagrama 
que repite su forma

Y se hace mas fuerte,
se impone en el silencio de una noche.

Camina en mi,
con notas pequeñas,
y dulces,
graves y profundas...


Puedes hacerlo,
te doy derecho.

Sólo redime mi noche,
cambia mi sueño.

Si puedes hacerlo,
te doy derecho.

Que esta noche...


Que esta noche nadie se acuerde de mi

Que esta noche
nadie pueda mirarte en mis ojos

Que nadie me lea
extrañando tu voz

Aunque prometí no hacerlo

Creo que ya no te extraño a vos
extraño lo que Yo era cuando estabas

Tu mano sin fin,
tus ojos que brillan
y me encienden a mi.

Luego de escucharte,
arrojar mil palabras, y categorías,
y explicaciones al viento...

Llorarlas, para que sepas que era cierto

Luego, luego de eso
Sentí paz...

Quizá vos podrás decirme que no es cierto.

Pero a pesar de que lo que decías
pude sentir tu abrazo en mi, adentro.

Porque no me odiaste,
como yo no pude hacerlo.

Porque en el fondo no entendes,
como pude retratarte sin forma,
en miles de palabras.

y constituirte tu cuerpo,
tus piernas,
tus huellas al caminar.

Corres más que el tiempo.
Más que el año,
que se fue sin prisa,
y no quiso esperarme.

Sabes?

Alguien si quiso abrazarme.
ya no de palabras.

Lo hizo en silencio,
casi sin conocerlo.

No fue nadie, o si no lo sé.

Solo quiso, y yo lo acepte.